En la Santa Iglesia de Jesucristo de los Baname en Benin, África, miles de fieles se reúnen para adorar a Dios. Pero para ellos la divinidad está encarnado en una mujer de 25 años, que promete acabar con el reino del infierno en la tierra.
Vicentia Tadagbe Tchranvoukinni, que se hace llamar “perfecto” y “Espíritu Santo”. Se compromete a expulsar a los demonios que dominan el país, una referencia al vudú, la religión más practicada en el país.
La mezcla de la voz de las iglesias pentecostales, de la que formaba parte, con el ritual católico – ya unido a un ex sacerdote que ahora declara “Papa” – la Santa Iglesia hizo un llamamiento al Presidente de la República.
Su presencia carismática y enfrentamientos con otras religiones dieron a conocer en todo el país recientemente. En primer lugar por lo que fue expulsado del cuerpo que reúne a las iglesias cristianas de Benin y, más recientemente, cuando cinco fieles murieron en un ritual dirigido por ella.
A mediados de enero, cinco seguidores asfixiaron a muerte tras ser encerrado en una habitación donde deben rezar por la liberación. El humo de la quema de incienso en el lugar causó la asfixia. Hasta ahora, ni ella ni el liderazgo de la iglesia fueron atribuidas.
Cada domingo, miles de seguidores subir una colina en el distrito de Zou en Baname, a 130 kilómetros al norte de la capital, para escuchar Vicentia predican. Fundada en 2009, la iglesia – hoy clasificada como una secta – ha crecido rápidamente en todo el país.
La imagen de la deidad encarnada, con su nombre de sombrero rojo, se distribuye en varios lugares. El informe realizado por ella combina elementos del cristianismo y las religiones animistas tradicionales del país. Vicentia afirma haber caído del cielo en la tierra, donde fue encontrado por un pastor de ganado en los arbustos.
Su discurso es que vino a poner fin a una “misión”. Su mejor aliado es el Papa Christophe 18, nombre adoptado por el ex sacerdote Mathias Vignan, la más grande “evangelista” de la Santa Iglesia de Jesucristo de los Baname.
Desde que asumió el cargo, ha instado a sus seguidores contra los católicos que se niegan a aceptar Vicentia. “La gente no entiende que el cielo y la tierra Espíritu Santo el creador utiliza el cuerpo de perfecto como su templo,” explica a la prensa .
“Ella vino a acabar con el reinado de Belcebú, un fin al dominio brujería y todos los espíritus malignos que impiden a la humanidad a desarrollar”, subraya.
En misiones de evangelización llevadas a cabo por sus seguidores, hay informes de conflictos y la agresión, incluyendo muertos. Los “guerreros de oración”, dejando los palos y machetes armados sobre el terreno y no tiene miedo de usarlas contra rechazarlos.
En enero de 2014, el gobierno de Benin inició una investigación formal sobre la iglesia cuando comenzó a recibir numerosas quejas “” de las comunidades religiosas, políticos y líderes tradicionales.
En ese momento, el ex Presidente de la República, Thomas Boni Yayi, personalmente buscó Vicentia para las conversaciones. Hasta la fecha, no se tomó ninguna acción legal en su contra. Desde entonces, la esfera de influencia de Tchranvoukinni sólo creció.
Ella defendió públicamente la candidatura del Presidente Patrice Talon, elegido en marzo de 2016. Desde entonces, a pesar de las quejas, la Iglesia de Baname tuvo un crecimiento exponencial.
Aquí el video para que saquen sus propias conclusiones:
Fuente: noticiacristiana
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